La espiritualidad como modo de vida simple y ordenada

Recuerdo que desde muy pequeña me he sentido atraída por la vida espiritual o lo que conocía de ella hasta ese momento y durante muchos años me he mantenido en la búsqueda de ese conocimiento hasta adaptar la espiritualidad como modo de vida que me ayuda a simplificar y calmar mi interior, descubriendo así una de mis más grandes pasiones, la planificación consciente.

Si no entiendes de qué se trata ser espiritual espero que este artículo puede explicarte un poco, si te has sentido alguna vez igual que yo por la espiritualidad o si ya la vives sin duda esta lectura es para ti y si quieres vivir de una forma más simple y profunda te va a encantar lo que leerás.

En el blog post sobre Estimula tu cerebro para planificar y organizar, te conté que la espiritualidad en la actualidad es la base de todas mis decisiones, porque ha sido la única forma en la que he podido minimizar un poco el cometer tantos errores, que aunque dejaron heridas también grandes aprendizajes, no es que dejé de equivocarme, estoy lejos de eso, pero me he dedicado a que esos errores sean menos intensos.

La espiritualidad como modo de vida

¿Sabías que una de las características de una persona espiritual es tener un sentido alto de curiosidad por el mundo? Y a mí me encanta curiosear, investigo todo aquello que pueda trabajar mi interior; siempre y cuando se alinee a mis principios y valores me permito verlo, estudiarlo, experimentarlo y si fortalece mi espíritu lo aplico y lo mantengo.

Pero te cuento que este tema en un principio me tenía algo confundida, por eso lo “curioseé” aún más para ampliar mi investigación, explicármela a mi misma y ahora a ti, nada es casualidad.

Comenzando por lo básico, en la página Significados.com dicen que “La espiritualidad humana es definida como la consciencia de una parte de nosotros que no se manifiesta materialmente y que está ligada a algo superior a todos los seres vivos. En religión, es dirigir la vida y el desarrollo espiritual según las enseñanzas de Dios o de un profeta.”

No es sorpresa para nadie que soy cristiana y si no lo sabías, sorpresa. Soy cristiana evangélica porque creo en Jesús desde el evangelio, fue allí donde encontré el verdadero sentido de mi espiritualidad y es desde donde la vivo, reconociendo que Dios es un Dios de orden y específico.

Ahora bien, mi intención de profundizar aún más en mi relación con Dios va más allá de la religión, por eso sin irrespetar mis propias creencias y aprendizajes bíblicos, he abierto mi conocimiento espiritual a más experiencias.

Unos le llamamos Dios, otros energía superior, otros universo, llámese como quiera llamarse, para ser espiritual es importante creer en algo más grande que nosotros mismos porque sólo de esa forma podemos trascender y profundizar en nuestro ser.

Revistas UPB de Colombia afirma que “Ser espiritual es avivar las posibilidades de estar permeado por el mundo de Dios, independientemente de la creencia que se tenga de Él, la espiritualidad es siempre estar dispuesto a recibir de su esencia la luz,  fuerza y bondad con la que puede llenar al ser humano.”

Te daré dos explicaciones más que me gustaron y considero importantes resaltar:

• “La espiritualidad implica habitualmente la intención de experimentar estados especiales de bienestar, a practicar los sentidos de la solidaridad, la empatía y la posibilidad de conectarse con la esencia del ser humano en un sentido más amplio.” Extraído de danielcolombo.com
•  “El término en si significa el “espíritu” o estilo de vida. Se quiere vivir de lo que uno es y hace. Una vida que se quiere vivir en toda su realidad humana, con autenticidad y profundidad, según las mociones del Espíritu Santo” Extraído de biblia.work

Vivir de un modo espiritual simplifica la vida y la hace más ligera, eso era lo que yo necesitaba entre tantas emociones, pensamiento y caos mental. Y no se trata de estar arrodillado en oración o meditación 24 horas al día, sino vivir una vida más calmada desde el orden y la armonía del alma.

Esto trajo mucha paz a mí ser.

La espiritualidad también es una fortaleza

No es mentira cuando te digo que toda mi vida he sentido mucho interés por lo espiritual; desde niña participé en muchos eventos y servicios dentro de las iglesias católicas y cristianas, por alguna razón también me llamaba la atención la vida de las monjas, el yoga y demás disciplinas, es que era algo que me atraía y creo que tiene mucho que ver con mis propios dones y fortalezas.

Siempre me ha salido como parte fundamental de mi personalidad (aunque no lo parezca). En un test psicológico sobre los dones del Espíritu Santo mi don principal es el de la fe y en el test VIA de Martin Seligman, padre de la Psicología Positiva la espiritualidad es mi primera fortaleza, por eso estudié de qué se trata según esta rama tan bonita de la psicología.

Según los especialistas la espiritualidad como fortaleza es “un recurso poderoso que se relaciona directamente con el sentido vital, ayudando a tener mayor consciencia de sí. Pertenece a la virtud de la trascendencia. Busca afuera de sí mismo al conectarse con algo magnífico y permanente, conectarse con los demás y con algo divino.”

Continúa con que es “una manera más profunda de conectarnos con nuestra vida, con nuestro ser. Es una capacidad de tener fe, de vincularnos con “algo” que es más grande que nosotros mismos; con una convicción absoluta que ayuda a construir el significa de la vida.”

“La espiritualidad describe lo privado, es intimidad compartida entre el ser humano y lo divino. Con creencias sagradas, visión personal estable, sensación de pertenencia y que no todo el tiempo está a flor de piel.”

Y termina diciendo “Ser espiritual es ser consciente de que todo lo que actuamos, pensamos y sentimos es.”

¿No es hermoso este estilo de vida?

Una de la cosas que más impacto tuvo en mi la espiritualidad como modo de vida fue el desear vivir con menos cosas, eso incluye objetos, relaciones, emociones y hasta actividades, decidí quedarme en la medida de lo posible con solo aquello que “me genere felicidad” tomando la filosofía de Marie Kondo especialista en el orden de los espacios pero en una visión más amplia.

Mi amiga y diseñadora Zugey Gutierrez, ama el minimalismo y ella en su explicación personal acerca del por qué es minimalista me dijo “Siento que el vivir de esta forma me conecta más con mi espiritualidad” y estuve tan de acuerdo, yo no sabía cómo explicar este deseo de vivir sólo con lo necesario, y eso nos conecta aún más con quienes somos desde el espíritu y con nuestra intención más profunda de alcanzar metas y mejorar nuestra vida.

En pocas palabras, se deja de complicar la vida cuando somos más simples y profundos (aunque para quien no lo entiende pareciera lo contrario)

Hay algunas cosas de mi investigación personal que no guardé con créditos pero espero puedan disculparme y beneficiarse de estas ideas tan hermosas:

• La espiritualidad es un concepto amplio que no se atasca en un único significado, la espiritualidad por si sola hace espacio al conocimiento.
• La espiritualidad se vive a nuestro ritmo y manera, cada persona la comprende y experimenta de diferentes formas, pero todos van hacia una misma dirección.
• La espiritualidad nos conecta con las cosas de este mundo y con lo divino.

Características de una persona espiritual

Esto era algo que yo necesitaba saber y agregar dentro de esas virtudes que deseo desarrollar en mi vida, utilicé a Biblia, libros y lecturas de la Psicología Positiva e internet desde las fuentes ya citadas. Una personas espiritual:

• Sabe perdonar todas las veces que sean necesarias y sigue adelante.
• Ayuda a las demás personas sin esperar nada a cambio.
• Actúa en base a sus valores y principios.
• No se enfoca solo en lo material.
• Entiende que el placer instantáneo no da la felicidad.
• Tiene un alto sentido de curiosidad.
• Está en armonía con su esencia y su vida humana.
• Es una persona que busca estar en balance.
• Todo en ella está relacionado al ser interior y a la autorrealización, y no tanto al conocimiento.
• Crece hacia la luz, hacia la belleza y hacia la sabiduría.
• Acepta las cosas positivas o negativas que suceden.
• Intenta ver perfección en todo.
• Irradia amor y paz.
• Al relacionarse trata con amor y simplicidad. Sabe manejar conflictos y acepta a todas las personas tal cual son.
• Apoya a otros a encontrar su propia conexión espiritual.
• Entiende que todas las oportunidades positivas o negativas son perfectas para que practiquemos nuestro amor por la vida.
• Está consciente que su éxito en la vida se mide en la cantidad de alegría que experimenta en su día a día.
• Su conexión con Dios hace posible manejar cualquier situación.

Estoy segura de que deben existir muchas más y estoy lejos de alcanzar por lo menos estas, pero confío en que voy en el camino correcto y con la mejor compañía.

Ser espiritual apoya la planificación y la organización personal

Ok aquí es donde despertamos la consciencia ¿Cómo ser una persona más espiritual? Si de verdad deseas serlo, con lo que he aprendido hasta ahora podría decirte que la mejor manera de comenzar es conocerte a ti mismo, aceptarte y conectar con aquello que entiendes como superior a ti, que en mi caso es Dios.

Sólo Dios dobla mis argumentos cuando son absurdos o doblega mi intención de controlarlo todo, es el peor enemigo de mi ego y eso me encanta porque es lo que en mi humanidad me cuesta más trabajar.

Pero, como en el Método Planes de Bienestar intentamos ser más específicos a la hora de querer hacer algo, te voy a dar tres tips para que comencemos a trabajar nuestra área espiritual de modo simple y sin tanto protocolo.

1. Dedicar tiempo diario a nuestro espíritu: ¡Agéndalo!, hay quienes les gusta en la noche, en la tarde o como a mí en las mañanas, me gusta dedicar el primer tiempo de la mañana a mi relación con Dios. Esto paso a paso se convertirá en un hábito si eres constante. En ese tiempo puedes orar, poner música espiritual, meditar, leer, escribir, todo eso con la intención de fortalecer el alma y el espíritu.
2. Elige un lugar especial: O por lo menos un sitio donde te guste estar y sientas paz, normalmente este tiempo es en mi cuarto frente a mi peinadora.
3. Complementa tu tiempo espiritual con algo que te apasione: Yo le agregué papelería decorativa, luego un té, después la meditación mindfulness y luego los aceites esenciales, todas esas cosas llegaron a mi de un modo espiritual y eso las hizo parte de mi tiempo con Dios; tú puedes ir poco a poco con una a la vez tal cual como me pasó a mí, incluso pueden ser otras o agregar luego de tu tiempo espiritual alguna otra actividad que te guste como trotar o atender el jardín.

Te daré dos tips extras que son un poco más profundos, si quieres inyectarle adrenalina a tu tiempo espiritual.

1. Estudiar y desarrollar un tema en específico: Me ayuda mucho investigar temas para mi desarrollo personal. Por ejemplo hace poco estudié sobre la diferencia entre la feminidad y la sensualidad, si quieres leerlo dale clic aquí  que es el blog de entaconadas.co. Incluso este blogpost que lees comenzó como un estudio que hice en mi tiempo espiritual buscando fuentes en internet ¿Qué tema te gustaría profundizar a ti para tu desarrollo espiritual?
2. Aprovechar este tiempo para desarrollar una virtud: Si quieres ser una persona más amable, haz una lista en tu tiempo espiritual de qué puedes hacer para tener más amabilidad con los otros, colocando escenarios y tiempos reales, por ejemplo: – Saludar a todas las personas hoy con una sonrisa y preguntarles cómo están (Si es posible elogiar a algunos)

Dios es un Dios de orden y específico

Así cierra el planner impreso de Planes de Bienestar y fue la primera frase con la que comencé este camino como consultora en planificación consciente hace tres años. Dios ha estado en todo el camino recorrido de este proyecto, desde la guía y dirección, los colores, el lirio de mi logo que también lo llevo como tatuaje, varias de las frases y hasta el nombre del método inspirado en Jeremías 29:11 (que es también la fecha de mi cumpleaños).

Una vez escuche decir que “Así como está tu habitación está tu relación con Dios” y eso me marcó para toda la vida, porque aunque no es necesariamente cierto, yo creo que Dios es un Dios de orden y si nos hizo a su imagen y semejanza, debemos reflejar lo que en esencia Él es.

Por otro lado, el desorden y el caos interno para mi es bulla ensordecedora que grita en silencio intentando ocultar alguna situación o condición de nuestro interior. Si esos gritos no se calman será muy difícil escuchar al espíritu y menos a la voz de Dios, es más fácil trabajar nuestra espiritualidad cuando hay orden no obsesivo en nosotros mismos.

Dice una amiga que yo “soy una cristiana medio loca” y eso me encanta porque me gusta reflejar la diversidad que también viene de un Dios que no tiene favoritos según Romanos 2:10b.

Para aceptar que soy una mujer cristiana tuve que ir a terapia y desde mi propia aceptación fue que comprendí el amor de Dios y mi atracción hacia la espiritualidad, eso me ha abierto un gran número de puertas que me invitan cada vez más a aceptar mi imperfección y trabajar en ella cultivando la humildad para aprender de otros. Este fue el impulso para comenzar a ordenar todo en mi interior y día a día sigo trabajando en eso porque en este plano la idea es ser constante en la carrera.

¿Ahora logro explicar mejor porque mi espiritualidad es la base de todo? Sino con mi alma tan desbocada e impulsiva ¿Cómo hubiese podido encontrar mi propio orden? Ahí es donde está mi corazón ¿Y el tuyo?